VER ∣∣ SENTIR ∣∣ CREAR
“—¿Qué quieres que haga por ti?— le preguntó.
—Rabí, quiero ver — respondió el ciego.
—Puedes irte —le dijo Jesús—; tu fe te ha sanado.
Al momento recobró la vista y empezó a seguir a Jesús por el camino. ”
La filósofa Marie-José Mondzain afirma que hoy vivimos en un sistema optocrático, una especia de ocularcentrismo. ¿Qué quiere decir eso? Hoy vivimos en una sociedad dominada por imágenes. Dondequiera que miremos, hay imágenes: vallas publicitarias, pantallas que batallan por nuestra atención, volantes con imágenes, diarios llenos de imágenes acompañadas de titulares llamativos, revistas, programas televisivos, pantallas de los teléfonos inteligentes, et al.
Hoy sabemos mejorar interpretar imágenes que textos largos y detallados. Preferimos ver un vídeo informativo que leer un libro. Nos deleitan las imágenes - nos instruyen, nos inspiran y nos retan a ser, muchas veces, lo que no somos. Algunas ejercen presión y otras consuelan. La verdad es que hoy no podemos negar el poder de las imágenes.
En muchas tradiciones cristianas, el arte ha servido como herramienta para la meditación y la oración. La Biblia nos enseña que debemos evitar la idolatría de las imágenes y que no debemos intentar plasmar la imagen de Dios en piedra o sobre un lienzo. Sin embargo, esta prohibición de parte de Dios no incluye las representaciones artísticas de Jesús ni de los relatos bíblicos.
La encarnación de Jesús y el arte cristiano
Jesús, el Hijo de Dios, se rebajó y tomó forma humana. Esta gran verdad es fundamental para la fe cristiana. Sin la encarnación de Jesús, no tenemos esperanza de una vida nueva ni tampoco para la futura resurrección de entre los muertos. ¡Debemos celebrar el hecho que Dios, quién jamás fue limitado por una naturaleza humana, se quiso limitar con el fin de darse a conocer en la tierra!
“Aunque existía con el mismo ser de Dios,
no se aferró a su igualdad con él,
sino que renunció a lo que era suyo
y tomó naturaleza de siervo.
Haciéndose como todos los hombres
y presentándose como un hombre cualquiera,
se humilló a sí mismo,
haciéndose obediente hasta la muerte,
hasta la muerte en la cruz.”
Las representaciones artísticas de Jesús en realidad son una celebración de su encarnación. Si bien no sabemos la forma del rostro de Jesús, plasmar su persona y comunicar su obra a través de medios artísticos es una forma de revivir los relatos bíblicos para que puedan alcanzar no sólo nuestro intelecto, pero también tocar nuestros corazones.
La palabra puede hacer mucho para informarnos, pero Dios quiere ir más allá de relatar detalles sobre su amor y el plan de redención. Dios quiere transformar nuestra imaginación, nuestra capacidad para pensar, esperar y vivir una vida juntamente con Cristo. La meditación de las Escrituras debería estar siempre por encima de la visualización del arte cristiano. Sin embargo, el arte puede servir como una excelente herramienta para la devoción cristiana.
Acá en el blog del Taller, exploraremos distintos aspectos del arte cristiano y la visio divina, un tipo de lectura sagrada del arte para mejor contemplar y meditar en la obra de Dios entre nosotros.
Acá les dejamos una bibliografía para seguir indagando en el tema del arte y la fe.
Bibliografía del arte cristiano
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