Esta carta la dirijo a todos los jóvenes, tanto hombres como mujeres que sienten el deseo y el llamado de servir a Dios de una manera especial en la iglesia para el bien del mundo.
El Taller Teológico Latinoamericano sirve como un recurso más para la iglesia
que quiere reflexionar acerca del camino de Jesús y caminar juntos en su misión.