La cuestión de Dios es una lectura imprescindible para todo estudiante de filosofía o psicología. Es una lectura urgente también para todos aquellos que viven en culturas o sociedades (como la argentina) en que el espíritu de la época ha sido tan influenciado por Freud.
¿Qué tal si realmente estamos enamorados del amor y no de una persona en particular? ¿Qué tal si realmente estamos enamorados más de una causa que un grupo de personas en particular? La literatura universal nos puede dar una mano para entender esta compleja realidad.
Cuando los cristianos no denunciamos los males de nuestra sociedad, nos volvemos cómplices silenciosos del mal. Nuestra denuncia de la opresión y la injusticia debe estar acompañada siempre por una práctica libertadora de justicia y de paz.