«Muchos siguen a Jesús hasta la fracción del pan, mas pocos hasta beber la cáliz de la pasión. Muchos admiran sus milagros, pero pocos le siguen en la ignominia de la cruz.» - Tomás de Kempis
Caminando con Jesús hasta la cruz
La Cuaresma es una oportunidad para entrar en esa historia y de alguna manera mística, ensayar la historia de la salvación. Es una oportunidad para reconocer nuestra finitud y nuestra pecaminosidad. La práctica de la Cuaresma es sombría, pero en realidad, subyace en la experiencia de la Cuaresma una expectativa prometedora. Somos como prisioneros que están a punto de salir de la cárcel. Somos como enfermos hospitalizados esperando su pronta salida para casa.
Abrirse a la voz de Dios
Basilio de Cesarea y el joven rico
Una homilía de Basilio de Cesarea basada en Mateo 19:16-30, el encuentro entre Jesús y el joven rico. Vale la pena leer prédicas muy antiguas (del IV siglo) para primero conocer la rica herencia de la tradición cristiana que tenemos y luego, esforzarnos para conectarnos con nuestro pasado ahora en el presente.
La experiencia del amor activo
Regla de vida
La fe y la duda
Navidad y yo tan lejos
Las disciplinas espirituales
La tristeza de Navidad
Es costumbre hacer regalos en navidad. Muchos regalos. Toneladas de papel pintado, kilómetros de hilo y de lazos dorados, tarjetones enormes que sirven de felicitación. Queremos así saldar nuestras dudas de gratitud con aquellas personas a quienes algún favor. Pero esto es muy fácil, demasiado cómodo. A un cristiano se le exige mucho más. Tiene la obligación, no de hacer regalos, sino de convertirse él en regalo, de convertirse en don. Hacer de su vida una entrega sin reservas. Para todos. Porque todos los hombres son sus acreedores. Porque el cristiano ha de sentirse deudor para con todos sus semejantes.